Algunas amigas me comentan (en
directo no en el blog) que no les deja de sorprender la “imaginación” que
tenemos l@s que escribimos en el blog porque a ell@s no se les ocurre que hacer
ante una página en blanco.
A veces un post surge como el
cúmulo de pequeñas cositas que te van pasando. En aislado te da para hacer un
twitter pero como aún me estoy peleando para poderlo usar y añadirlo al blog
pues se quedan dentro de mi cabeza dando vueltas a la espera de encontrar un
sitio acogedor donde quedarse. Así que ahí va eso....
....1
El otro día nos visitó en la oficina una
compañera que está de baja maternal. Vino con el niño. Así que todo el mundo se
pone a hacerle monerías al pequeñajo (yo no, la verdad con tanto afecto en el
aire me saturo y me entra el frio emocional).
Como es habitual, la madre parece
quedar en segundo plano -en la sombra- deslumbrada por los focos que apuntan a
su hijo. Aprovecha para echarme una mirada de complicidad y me pregunta –casi
con un poco de vergüenza-: ¿Oye, a ti te dolía la muñeca de cargar con él todo
el día? Es que a mí me duele el hombro y la muñeca y no sé qué hacer.
Apunte mental
mío:
Post sobre
porque no se nos advierte de hacer clases de gimnasia antes del embarazo para
ponernos fuertes y cachudas para afrontar las exigencias físicas de los
primeros meses de crianza.
Antes de ser mamá: PONTE CACHAS!! |
y 2,
Otro día de la semana pasada: ME REGALO UN MASAJE + AMIGA
(Mademoiselle S). Lo hemos planeado desde hace un mes nos hace ilusión quedar
porque hace mucho que no nos vemos. Vamos a un hotel de esos de lujo de mi
ciudad en los que ni sueño con entrar. Nos acompañan al Spa. Nos enrollamos en
toallas tamaño XXL (que no tendré que lavar yo), entramos en una salita con
incienso y música relajante. Una amable y hiperservicial masajista nos atiende
alternativamente. Ahora tú una mascarilla facial, ahora a ti unas piedras
calientes para los Chackras (ah! Pero yo tengo de eso?).
Hemos contratado un masaje de hombros para arriba. Cuando
me lo hace noto que sus manos intentan deshacer una pelotita que sin previo
aviso se ha instalado en mi hombro izquierdo. Esta a medio camino entre el
hueso y el cuello, escondida la muy pérfida entre los músculos y la grasa. Dura
y firme no se marcha.
- -
Masajista: esto es una contractura y de las grandes.
- -
Yo: Sí. Soy madre hace no mucho. Esto no es nada al año de nacer Mi
Churrumbel (Mi Ch) tuve que ir de físios porque de hombro a hombro tenía la
musculatura como si me la hubieran cambiado por tubería de hierro. O sea que
esto es una minucia de nada.
Ella asiente. Sabe de qué le estoy hablando.
Apunte mental
mío:
Post sobre como
tengo una pelotita en el hombro y como me recuerda lo del grano de arena en una
ostra se convierte en perla y nosotras, en cambio, lo internalizamos y así nos
va:
hechas unos rastrojos.
hechas unos rastrojos.
Rastrojo-Mama |
y ya son 3,
Luego vino la
sesión de tumbarse en una hamaca a tomar un fantástico té, ponernos al día de
nuestras respectivas vidas, visitar el jacuzzi y seguir hablando entre burbujas, luego: la piscina
interior del spa. Me encantó la piscina. No era muy grande pero era toda para
mí.
Imagen alegórica de Lonely mama en la piscina |
Mientras, Mademoiselle
S se tumba lánguida a ver caer el agua por una cristalera de al menos 10 metros
de altura y 40 de ancho, es como si estuviéramos en una gruta detrás de una
cascada en medio de la selva y nos encanta.
Tanto relajo
pasó factura. Al día siguiente mi cuerpo no respondía. No fui a trabajar.
Imposible casi levantarme de la cama. No te das cuenta del esfuerzo que haces
cada día para seguir adelante y mantener el ritmo hasta que te das un respiro aunque
solo sea de un par de horas.
Apunte mental
mío:
Post sobre como
forzamos el cuerpo y que al límite a veces que vamos para sacar adelante a la
prole (aunque sólo sea 1).
4 y final
Esta
semana hago una visita de supervivencia-ultra-rápida a la pelu (voy una vez
cada dos meses y medio cuando las raíces son gigantescas, las puntas están descoloridas
y los pelos parecen un amasijo desordenado por más que pase el peine).
Hablo un
poco con el peluquero –padre aún más reciente que yo- y te das cuenta de las
lagunas que tienes sobre los primeros meses de vida de nuestros Mi Ch
respectivos. Te da por pensar si es una estrategia de la naturaleza (como lo de
no poder recordar el dolor) para que te lances de nuevo al proceso de la
procreación. El tema también surge en el blog.
Y eso me hace
enlazar con otra idea de post que sigue vagabundeando por la cabeza:
De cómo nos
pasamos el día con el móvil en la mano haciendo videos o fotos.
Y si no será
una forma subconsciente de intentar ponerle un parche a la memoria porque intuimos
que nos la va a jugar la muy artera.
Mama haciendo fotos y papa un video. El recuerdo está asegurado!! |
Si has sido capaz de llegar hasta aquí:
MI MÁS SINCERA FELICITACIÓN!!!
Y
Buen FIN DE SEMANA!!!!
jajjajajaaa tienes toda la razón con de ponerse cachudas, deberían de incluirlo en las clases de preparación al parto. y lo olvidarse de los primeros meses también, totalmente de acuerdo. estoy contigo en que es una estrategia de la naturaleza, sí.
ResponderEliminarChica! Que rapidez de respuesta!
ResponderEliminarJajajaja!!tomaré nota para el futuro. Las fotos, geniales.
ResponderEliminarUn beso.
Yo cada vez que veo a un niño recien nacido por la calle, pienso: el mio no ha sido nunca así de pequeño, en serio no lo recuerdo...
ResponderEliminarah si, yo miro fotos de mi bebé de recién nacido y no lo reconozco... tan pequeñito!! en qué momento creció tanto??
ResponderEliminarahhhh!!!! lo que me he reído!!!! Me ha hecho muchas gracia porque has expresado muy bien como funciona el cerebro de las womanbloggers.
ResponderEliminarY la foto última, madre mía, ¡qué plano!
Me quedo por aquí si no te importa :)
Un beso
Hola!
ResponderEliminarNo solo no me importa sinó que me encanta. Sé muy bienvenida!!!